El reino de los Fata es un mundo paralelo al mundo de los Hombres que fue creado en la guerra de la creación por los nominadores modeladores y que no se rige por las normas humanas.
La primera característica sorprendente de este mundo es el hecho de que no existe el sol como en nuestro mundo. Es decir, sí hay día, pero tienes que ser tú el que te muevas por el terreno pasando por diferentes lugares hasta llegar a la zona de claridad (donde estaba el Cthaeh, sino recuerdo mal) También puedes ir al contrario, desde la zona de luz hasta la más oscura, donde incluso puedes llegar a tocarla, como bien leímos cuando Felurian le hizo el shaed (la capa hecha con sombras) a Kvothe.
La segunda característica es la Luna, que se pasea entre el mundo de los fata y el de los humanos. Cuando la luna está llena, los dos mundos están muy cerca y es fácil para un ser Fata cruzar la línea y adentrarse en el de los hombres mortales, atravesando alguna de las puertas que conectan estas dos dimensiones. Por el contrario, cuando hay luna nueva los hombres mortales, atraídos en su mayoría por Felurian, pueden entrar en el Reino Fata sin darse cuenta. Sabiendo esto podríamos citar la mítica frase en la que se resume el temor de un hombre sabio: «Todo hombre sabio teme tres cosas: la tormenta en el mar, la noche sin luna y la ira de un hombre amable» Podríamos suponer que esa noche sin luna se refiere al riesgo que supone perderse y adentrarse en el Reino de los Fata.
La tercera característica es el tiempo. En El Temor de un Hombre Sabio podemos comprobar que el tiempo en el mundo de los fatas transcurre de forma diferente, más rápido. Kvothe pasa un largo período de tiempo con Felurian en ese mundo, pudieron ser semanas, meses o años, pero cuando vuelve a nuestra dimensión sus compañeros le confirman que sólo ha estado por ahí tres días. Recordemos que a Kvothe esto le extraña mucho porque en un momento se tuvo que afeitar y al parecer le tardaba bastante en crecer la barba. Esto a mi me lleva a una pregunta, ¿es posible que Kvothe en un futuro próximo vuelva a este reino y pase allí mucho tiempo? Esto significaría que, en el momento posadero, podría tener en realidad muchísimos más años, y por eso todo el mundo piensa que realmente es más mayor de lo que es. Me explico, Bast se supone que tiene 150 años, pero aparenta unos 20. Podría ser que a Kvothe le pasase lo mismo. Creo que en el libro no se confirma en ningún momento que los hombres que viven allí no envejezcan, pero podría ser una posibilidad. A lo mejor, Kvothe, a sabiendas del aprecio que le tiene Felurian, volviese a la dimensión huyendo de alguno de sus muchísimos enemigos, y que se ocultase allí por algún tiempo.
No sé a vosotros, pero a mi el Reino de los Fatas me recuerdan a esos cuentos que nos contaban cuando éramos pequeños en los que un joven se perdía por el bosque, encontraba un claro en el que había un gran banquete y muchas chicas guapas (que resultaban ser elfos) y bailaban, comían, bebían y cuando él creía que sólo habían pasado algunas horas volvía a su pueblo para encontrarse con que todos sus seres queridos habían muerto muchos años atrás y que en realidad no pasó algunas horas de fiesta, sino que perdió la noción del tiempo y fueron años.
¿Qué os parece esto?